La estatua del Cristo Redentor es una de las maravillas del mundo moderno y se han convertido en una de las atracciones únicas de todo Brasil y que se ubica en la ciudad de Río de Janeiro. Esta estatua se erige en la cima de la montaña de Corcovado, la cual, es visualizada por toda la ciudad de Río de Janeiro tanto por personas que ahí viven como turistas. Este es uno de los monumentos que ha sido conocido a lo largo de todo el mundo. El Cristo Redentor es como se le conoce habitualmente por las personas que viven en esta ciudad, aunque también es denominada como la estatua de Corcovado o el Cristo de Corcovado. Sin importar el nombre que se le dé, es una estatua con un hermoso diseño arquitectónico y que forma parte de las siete maravillas del mundo.

Para el año 2007, la estatua del Cristo Redentor fue nombrada como una de las maravillas del mundo, incluso ha superado a la Estatua de la Libertad que se ubica en la ciudad de Nueva York. Esta estatua que se ubica en la ciudad de Río de Janeiro no es tan antigua y es un poco más pequeña que la Estatua de la Libertad, aunque su presencia es percibida por todos los que habitan en la ciudad de Río de Janeiro, cosa que no ocurre con el famoso emblema de la ciudad de Nueva York.
El Cristo Redentor, tiene 125 pies de alto, lo que es aproximadamente unos 38 m tomando en cuenta su pedestal. Dentro de la estatua fue incluida una pequeña capilla dentro de su pedestal, tardándose así unos cinco años en construirse completamente. Su inauguración se llevó a cabo el 12 de octubre de 1931 por lo que se puede considerar que no es una estatua muy antigua con respecto a otras maravillas del mundo.
Datos importantes sobre el Cristo Redentor
El Cristo Redentor, toma la forma de un hombre, diseñado en proporciones humanas pero de un tamaño sobrehumano. A lo lejos, se puede observar como si tuviera la forma de una cruz en el cielo, pero al acercarse el tamaño toma la forma de un hombre. Estas dos versiones es lo que hace que esta estatua sea intrigante y maravillosa a la vez. Los antiguos griegos jugaban con las proporciones y las escalas del diseño, incluso Leonardo da Vinci popularizó la denominada geometría sagrada conjugando la figura del Hombre Vetruvian de brazos extendidos dentro de diferentes cuadrados y círculos. Pero sería el arquitecto Marcos Vitruvius, quien pudo notar y documentar todas las proporciones de la forma humana. Mucho antes del nacimiento de Jesucristo, el simbolismo unido a la cruz latina es profundo, aunque este diseño siempre se ha remontado a la antigua Grecia.
La estatua fue ideada para evocar la belleza en los materiales. Los brazos que se encuentran extendidos crean la figura sagrada de una cruz latina, logrando una proporción equilibrada que no solamente es agradable a la vista humana sino que también crea una fuerte emoción iconográfica cristiana. Los materiales de construcción que se utilizaron para esta estatua fueron de colores claros, que se reflejan fácilmente con la luz del sol y la luna. De igual forma, si no pudiera observar los detalles escultóricos, a lo lejos siempre se podrá observar una cruz blanca resplandeciente. Esta estatua tiene un estilo modernista que es bastante acogedor incluso para las figura religiosas del Renacimiento.

Construir esta estatua de gran magnitud fue un logro tal como los rascacielos históricos que inundan la ciudad de Nueva York o Chicago. Esta estructura fue ideada bajo una planificación delicada. Podríamos decir que esta comenzó a erigirse en 1926 cuando se iniciaría la construcción del pedestal y de la capilla que la conforma.
Los trabajadores que laboraban allí eran transportados por medio de un ferrocarril hasta la montaña para reforzar el concreto por medio de una malla de acero. La magnitud de esta estructura también da una especie de factor sorpresa. Cada una de las manos del Cristo Redentor miden aproximadamente unos 10.5 pies de largo, además, cuenta con una gran cantidad de baldosas triangulares que se encuentran incrustadas en hormigón armado de acero. Básicamente, el Cristo Redentor fue un desafío a todos los elementos, incluido a los ataques de tormentas eléctricas, cuestión que se culminó en 1931. Al igual, los diferentes diseñadores planificaron el mantenimiento continuo por medio de la creación de áreas internas con puertas de acceso a las diferentes áreas del estatua. Muchas empresas famosas de mantenimiento de estructuras han realizado la diferentes reparaciones a los azulejos que conforman la estatua.
La mayoría de los diseños arquitectónicos que se emplearon son simbólicos como los que se utilizaron en la Corte Suprema de los Estados Unidos o la estatua conocida que conforma la Bolsa de Nueva York. Las estatuas sirven como una expresión de creencias y que son valoradas por un gran número de personas. Además, se ha utilizado las estatuas para simbolizar la vida y el trabajo de una persona como el monumento creado a Martin Luther King en la ciudad de Washington. Las esculturas pueden tener diferentes tipos de significado, así como lo hace el Cristo Redentor, el cual consta de una cruz que se encuentra siempre presente en la montaña y que recuerda la crucifixión, el reflejo de la luz de Dios, un rostro humano fuerte y amoroso. El Cristo Redentor significa para los cristianos algo más que un simple símbolo de la religión.
La ubicación de esta estatua es muy importante. La estatua del Cristo Redentor ha sido un símbolo histórico para las personas que viven en dicha ciudad. Esta imponente construcción sirve para proteger al medio ambiente como una especie de techo sobre su cabeza, aunque no lo parezca. El Cristo Redentor es tan importante como cualquier refugio que se haya construido antes, además que brinda protección para el alma.
La estatua fue diseñada por el ingeniero y arquitecto brasileño Heitor da Silva Costa, el cual nació en Río de Janeiro el 25 de julio de 1873. Este profesional de la construcción, ya había usado una figura del Cristo Redentor en 1922 cuando se comenzaron los cimientos de esta estatua. Ganaría el concurso de diseño estatuas, aunque el diseño de brazos abiertos fue una idea del artista Carlos Oswald, quien ayudó a Silva Costa en la elaboración de los bocetos finales para el Cristo redentor.

Otra personalidad que influyó bastante en el diseño del Cristo Redentor fue el escultor francés Paul Landowski, quien en su estudio en Francia, realizó diferentes modelos a escala del diseño e idearía por separado el diseño de las manos y la cabeza. Además, había que tomar en cuenta los diferentes elementos ambientales a los que estaría expuesto como la lluvia y el viento. Por eso, su participación fue muy importante para la orientación a la construcción de la estatua sobre la montaña.
Las diferentes personas que formaron parte de este proyecto colocaron cada una de sus ideas para que fuera una realidad. Cuando pensamos en ello, podemos hacer una breve pausa y reflexionar haciéndonos pensar que la colaboración verdadera fue lo que hizo posible el Cristo Redentor y que pudo hacer que se volviera tan popular. Una sola persona no pudo haberlo hecho sola, por lo que diseñadores, arquitectos e ingenieros conjugaron sus diferentes estilos e ideas para crear una maravilla del mundo moderno en Río de Janeiro.
Datos turísticos
El Cristo Redentor es una de las maravillas arquitectónicas del mundo que vale la pena visitar, gracias a su posición geográfica, miles de visitantes acuden a él tanto de Brasil como del mundo entero. En los últimos años se han modificado los diferentes medios de transporte que te pueden llevar a visitar el Cristo Redentor. Puedes llegar de diferentes formas, en este artículo te estaremos hablando de tres específicamente. Cabe destacar, que las tarifas siempre dependerán del medio que selecciones.

Puedes ir en tren
Este quizás es uno de los medios de transporte que más se disfruta a la hora de subir al Cristo Redentor. El tren sale de la estación Cosme Velho, dirigiéndose por toda la montaña hasta la cima de Corcovado. Es uno de los medios de transporte que más llama la atención de los turistas debido a que cruza el parque nacional a y si te colocas del lado derecho del tren podrás observar la ciudad por completo, el bosque y la magnífica naturaleza del parque. El viaje dura aproximadamente unos 20 minutos y puedes conseguir un tren cada media hora. Estos trenes son muy fáciles de localizar debido a que tienen colores muy brillantes y llamativos con ruedas dentadas.

Compra de boletos
Puedes adquirir los boletos en diferentes partes de la ciudad de Río de Janeiro. Lo mejor que puedes hacer es encontrarlos directamente desde el sitio oficial de Corcovado en Internet. También puedes conseguir tiendas de boletería a lo largo de Río de Janeiro que son bastante reconocidas gracias a un símbolo de trébol de cuatro hojas.
Precio de los boletos
Si te has decidido viajar en tren, debes pagar el boleto de ida y vuelta de una sola vez. En temporada alta el precio puede variar a los 68 R$ mientras que en temporada baja puede encontrarse entre los 55 R$. Los niños que tengan edades entre 6 a 11 años pueden adquirir los boletos por un precio de 44 R$. Los que cuentan con menos de seis años no deberán pagar boleto. Por otra parte, hay una tarifa especial para personas mayores de 60 años y residentes de al menos 22 R$. Aunque podemos mencionar que la temporada alta en Río de Janeiro suele ser un poco caótica. Esta temporada en Brasil va desde el 15 de diciembre hasta el 15 de febrero y del 1 de julio al 21 de agosto, incluyendo todos los días feriados, sábados y domingos.
El tren comienza a funcionar desde las 8:00 am hasta 7:00 pm y pasan cada media hora. También, puedes reprogramar la salida que has adquirido originalmente si no logras abordar uno de estos trenes por diferentes motivos.
No olvides realizar el cambio de moneda, ya que los precios indicados aquí están colocados en moneda brasileña. Si quieres consultar los precios del tren puede ingresar al sitio oficial del Corcovado donde observará los precios auténticos.
Cómo llegar a la estación de trenes
Si desea llegar a la estación de trenes Cosme Velho, la mejor opción es tomando un autobús dependiendo de la parte en la que se encuentre de la ciudad de Rio de Janeiro. Éste lo llevará inmediatamente a un vecindario donde se encuentra la estación de tren. Otra forma de llegar hasta allí es por medio de taxi o incluso en metro, aunque la estación que se encuentra más cercana se ubica a 3 km de la estación de trenes Cosme Velho, lo que implica realizar una gran caminata antes de subir al Cristo Redentor.
La dirección es la siguiente: Debes subir a un autobús desde Praça XV en dirección a Zona Sul, y tomar uno de los siguientes autobuses, el 422, 498 o 180. Luego tienes que bajarte en la Iglesia São Judas Tadeu. Desde allí deberás tomar el autobús 570, 583 o 584. Directamente desde Copacabana se encuentra el autobús 583. Desde la estación de buses de Novo Rio debes tomar el 126 y bajarte en el Fluminense Sports Club. Luego debes ir a pie a la calle Laranjeiras y tomar las siguientes líneas: 422, 498, 497, 180, 584, 583.
Información adicional sobre el tren al Cristo Redentor
Una vez que te encuentras en la estación esperando el tren, debes ser paciente y esperar un poco para que el tren comience a avanzar aproximadamente a unos 15 km/h. Este tren tiene un peso de 36,8 toneladas, junto con la locomotora y los diferentes vagones. Además que transporta un promedio de 125 personas por hora. El viaje tiene una duración de 20 minutos al menos. Además, el sitio web oficial de Corcovado ofrece una lista de comportamientos prohibidos donde se hace énfasis en la prohibición de alimentar animales, portar armas de fuego, cazar o llevar objetos contundentes, escuchar música fuerte, tener pocas prendas de vestir, destruir el patrimonio cultural, entre otras prohibiciones.
Puedes ir en bus
Los autobuses fueron colocados por la misma prefectura de Río de Janeiro y es uno de los medios de transporte con el que puedes llegar al Cristo de Corcovado. Los podrás observar fácilmente ya que son de color blanco con un logotipo verde y azul que representa el Corcovado. Ellos esperan a los turistas en el metro Largo do Machado, Paineiras o Copacabana.
Este servicio de transporte trabaja desde las 8:00 am hasta las 5:oo pm y cuesta aproximadamente unos 62 R$ desde Copacabana o Largo Machado, o 35 R$ desde Paineiras. Estas furgonetas son blancas y robustas de la marca Mercedes, las cuales garantizan la comodidad y seguridad durante todo el viaje. Este paseo es un poco menos interesante que el de tren. Esto no quiere decir que no cruce el bosque de Tijuca, pero el camino es un poco más ancho que el del ferrocarril y podrás observar menos vegetación durante todo el viaje.
No existe un sistema de venta de boletos por adelantado para este tipo de autobuses, sólo hay que pagar directamente al conductor cuando ingresas al vehículo. Puedes conseguir que cada uno de los autobuses sale cada 10 minutos.

Puedes ir a pie también
Otra opción que resulta bastante interesante para subir al Cristo Redentor es a pie. No no es una idea descabellada, ya que muchas personas experimentan esto todos los días. Cabe destacar que no es la misma forma de abordar la visita al Cristo Redentor a pie, debido que te dedicará muchísimo más tiempo y tendrás que cruzar el bosque de Tijuca. Luego de una buena hora de caminata llegarás al monumento haciendo que sea muy diferente visitarlo a la forma clásica.
Para este tipo de viaje tienes que equiparte de la manera más adecuada posible. La caminata suele ser bastante fácil pero el trayecto es largo, por lo que debes tener algún hábito de caminar durante un tiempo prolongado. Deberás utilizar unos buenos zapatos y llevar botellas de agua, alguna provisión y un impermeable en caso de lluvias.

Atravesando el bosque
El trayecto comienza desde Lage Park, este es un punto de convergencia de bastantes autobuses. En la parte derecha notarás que hay una pequeña marca donde se inicia el comienzo del sendero. Allí se indica que la caminata tiene una duración de una hora y diez minutos, pero de acuerdo con el hábito que tengas de caminar y tu capacidad, puede que sea mucho menos. La caminata básicamente es una escalada, por lo general suele ser muy empinada y se trata de un bosque bastante denso. A medida que vas subiendo podrás notar diferentes cambios de panorama donde regularmente observarás la ciudad de Rio de Janeiro y el monumento de Cristo Redentor. La segunda parte es un poco más dura todavía, pero no es muy larga. Si caminas lentamente, puedes subir sin ningún tipo de problema. Luego lograrás llegar a una carretera que te lleva a la cima haciéndote encontrar directamente el monumento.
Una vez que llegues al Cristo Redentor solamente tendrás que pagar el derecho a acceso al monumento, mas no el transporte. La entrada puede costar entre 22 a 18 R$ todo depende si es temporada alta o temporada baja.
Es importante resaltar que el Cristo Redentor cuenta con espacios ideados para personas con discapacidad, además tiene un ascensor que evita subir todos los escalones. Cuenta con baños, restaurantes y tiendas.
Servicios
No se te hará muy difícil conseguir donde comer, o ver algo en el Cristo de Corcovado. Todo está muy bien organizado a pesar de que el lugar es bastante pequeño. Cuando hay una gran cantidad de turistas todo es muy bien canalizado y no tendrás problema alguno para observar el monumento.
Cuál es el momento ideal de al año para visitarlo
Río de Janeiro posee una temperatura bastante envidiable durante todo el año. Como se encuentra en el hemisferio sur, el verano básicamente es de noviembre a abril, este periodo es bastante cálido por lo que los europeos adoran ir a Brasil para evitar los fríos intensos de Europa. El invierno en Río de Janeiro también es un poco interesante, ya que es menos frió y agradable también. De junio a septiembre, la temperatura promedio gira en torno a los 29°C mientras que en verano sube sin ninguna dificultad a 35°C lo que puede ser una temperatura bastante complicada de soportar. Se puede decir entonces, que en cuanto a temperatura, Río de Janeiro es una ciudad bastante agradable de visitar durante todo el año ya que no hay estaciones con cambios bruscos de temperaturas y el calor puede ser soportable en algunas ocasiones.
En cuanto a las lluvias se refiere, durante los meses de mayo y octubre es muy raro que ocurra, mientras que el resto del año puede que llueva bastante.

En qué momento del día se puede visitar
Uno de los mejores momentos del día para visitar el Cristo de Corcovado es durante la mañana por distintas razones. Primero que nada, naturalmente hay menos personas, por lo que se hace más agradable, ya que luego de las 11:00 am se comienza a levantar la neblina sobre Rio de Janeiro y se puede limitar un poco la visibilidad. El clima cambia constantemente en la ciudad de Río de Janeiro ya que es de carácter oceánico. Al momento que se acerquen las nubes, no es necesario subir al Corcovado, ya que básicamente estarás por encima de las nubes y tu vista se obstruirá un poco.
La noche también suele ser un buen momento y bastante agradable para visitar el monumento. Básicamente tiene el mismo efecto que hace la torre Eiffel en París, haciendo que se ilumine completamente.
Qué actividades se realizan
La actividad principal que se lleva a cabo en el Cristo Redentor es la admiración de su majestuosidad, ya que estando tan cerca causa una impresión bastante grande. Además, puedes observar gran parte de la bahía de Río de Janeiro. Incluso, tienes la posibilidad de observar otras cuestiones como los bustos de los autores principales de la estatua, información al respecto del monumento, dirigirte a la capilla que se encuentra justo debajo y muchas otras cosas impresionantes que tiene el Cristo de Corcovado para ti.